MEDICINA ESTÉTICA

PEELINGS

La palabra “peeling” significa descamación o exfoliación y consiste en la utilización de sustancias químicas sobre la piel para renovar sus capas y poder así eliminar imperfecciones y favorecer un color uniforme. El peeling consigue una disminución de las arrugas, una piel rejuvenecida y bien hidratada, con una secreción correcta de grasa y una buena consistencia y luminosidad.

Normalmente se utilizan diferentes ácidos (glicólico, salicílico, mandélico, tricloracético, fenol, etc.) en función de los resultados que se busquen, del tipo de piel, del estado cutáneo, de la edad y del historial clínico.

Los peelings se utilizan para corregir arrugas finas, medias o profundas, para tratar el acné (activo, leve o moderado) y sus secuelas, el fotoenvejecimiento, el envejecimiento cutáneo, la flacidez, la piel fina y rugosa, la piel grasa, las manchas cutáneas, las queratosis actínicas, etc…

Tratamiento peeling

Es aconsejable dejar de utilizar cremas que contengan ácido retinoico u otros irritantes al menos 3 días antes del peeling facial. Previo a cualquier tipo de peeling se debe realizar una  limpieza profunda de la piel. Se aconsejará un cosmético postpeeling para una mejor recuperación de la piel y protección solar.